Ubicación: Este resguardo se encuentra al suroriente del municipio de Mapiripán en el departamento del Meta, sobre la rivera del rio Guaviare, siendo este la principal vía de acceso, donde hay aproximadamente 9.040 hectáreas, con un 60% aprovechable para labores agropecuarias, ya que, es terreno no inundable, el 40% restante es inundable pero indispensable para las labores de cacería que llevan a cabo los nativos, por esta razón es importante su preservación y protección.
Pueblo: Esta comunidad del pueblo Sikuani, originario de los llanos orientales, su población se estima en 350 personas, distribuidos en 72 familias.
El núcleo indígena de Caño Jabón hace parte, desde el punto de vista lingüístico, a la familia Guahibo, a la cual pertenecen un gran número de poblaciones del Meta, Casanare, Vichada, Vaupés, pero cuyo origen no se halla aún bien esclarecido, aunque algunos autores suponen que sus ascendientes antiguos son oriundos de la hoya del Orinoco y estrechamente relacionados con el conjunto cultural Arawak. El de Caño Jabón como el resto de las poblaciones Guahibo del país, posee las características de organización social estructurada alrededor de los clanes familiares con autonomía de gobierno respecto a las demás y dónde las decisiones son tomadas por el capitán, cuyo cargo se alcanza no por herencia sino por la capacidad de mando, la experiencia y el buen criterio para hacer justicia.
La economía de los indígenas de Caño Jabón se basa fundamentalmente en la actividad agrícola, En esta región cultivan especialmente la yuca brava, además del plátano, el maíz, el arroz y algunos otros.
La cacería y la pesca son actividades complementarias de la agricultura, la primera de ellas se practica muy poco, ya que, la mayoría de las especies propias de la zona han sido diezmadas sin consideraciones por los colonos. La pesca continúa siendo una actividad importante que realizan los indígenas para proveerse de proteínas, y la desarrollan con gran habilidad y buenos resultados.
Aun cuando en el terreno cultural los indígenas conservan rasgos importantes de sus modos ancestrales, materiales y espirituales de vida, en evidente que han sufrido el impacto del contacto con elementos no indígenas de los cuales han asimilado pautas nuevas de comportamiento Enel gobierno propio, en el vestido, en el trabajo y otras costumbres.